Dolor de cuello: causas y ejercicios para prevenir el dolor cervical
dolor cuello o cervicalgia

 

El dolor de cuello, o cervicalgia, es una de las molestias musculares más comunes en la actualidad. Más de un cincuenta por ciento de los adultos sufren dolores de cuello en algún momento de su vida o de manera continuada y deberían realizar ejercicios para el dolor de cuello. Aunque pueden tener un origen variado, nos acostumbramos a a vivir con este malestar y no es necesario, pues podríamos evitar estas molestias poniendo un poco de atención y dedicando algunos minutos al día a realizar estiramientos en la zona cervical.

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Como adelantaba, este tipo de dolores puede tener un origen muy distinto, desde una inadecuada torsión de las vértebras cervicales, hasta tendinitis o contracturas musculares. Cuando se origina alguna anomalía provocada por un traumatismo o tensión muscular, casi siempre, nuestro cuerpo tiende a compensar ese desequilibrio. Por lo que, con el tiempo, cada vez son más los músculos, las vertebras y los tendones que se que se van involucrando y el problema se acaba agravando. Aunque existen también algunas otras causas como estas:
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  • Posturas forzadas o malas posturas

Pasar gran parte del día a día forzando una posición incorrecta obliga a nuestra zona cervical a realizar un esfuerzo extra que acabará perjudicando a la salud. El trabajo de oficina, por ejemplo requiere una determinada postura corporal que suele venir acompañada de una inclinación de cabeza determinada. Algo que con el tiempo genera tensión muscular y puede acabar siendo el principal motivo de una lesión de espalda.

  • Traumatismos y esfuerzo físico

El dolor de cuello puede originarse al sufrir algún traumatismo o esfuerzo muscular considerable que podría ocasionar una serie de desequilibrios en la zona cervical que puede terminar afectando algunos músculos, tendones y vértebras, entre otros.

  • Estrés

Cuando se soporta una carga emocional muy intensa o se pasa una racha con mucho estrés, la espalda es una de las primeras perjudicadas, sobre todo si esta etapa es muy prolongada. La tensión emocional tiende a cargarse concretamente en la zona cervical, en los hombros y en la mandíbula.

  • Enfermedad

En ocasiones, el dolor de cuello es debido a enfermedades o patologías tales como artritis, artrosis, osteoporosis o una hernia, por ejemplo.

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[dt_sc_h2_title title=»Cómo prevenir el dolor de cuello» description=»»]

Buenos hábitos posturales en la oficina, en el coche, en la cama o al levantar peso nos ayudarán a prevenir el dolor de cuello

 

Muchas veces escuchamos consejos para evitar dolores de cuello o de espalda y aunque parecen muy obvios se nos acaba olvidando ponerlos en práctica y volvemos a adoptar malas posturas. Hay que ser consciente de qué posturas nos están perjudicando para prevenir el dolor de cuello.

Ser conscientes de las posturas que tenemos a lo largo del día es muy importante para identificar cuáles son nuestros hábitos posturales erróneos y de esta manera, poder evitarlos.

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  • Postura en la oficina

Si pasamos muchas horas al día sentados en importante tener un respaldo cómodo en una silla con la altura adecuada. Además es importante levantarse con regularidad para estirar piernas y espalda, siempre que se pueda.
También es importante que la altura de la pantalla del ordenador sea la correcta porque si tenemos que inclinar la cabeza, ya sea hacia delante o hacia atrás, estaremos cargando sobre la zona cervical un peso innecesario.

Así como la posición del monitor, siendo la correcta la que no obliga a girar la cabeza ni hacia la derecha ni hacia la izquierda. A una distancia no inferior a 40 cm, si no más bien entre 60 y 80 cm evitando así, estar demasiado lejos, pues de esta manera se tendería a forzar la vista y a acercarse a la pantalla involuntariamente, adoptando así, de nuevo, una posición poco adecuada

  • En pie

De nuevo el factor tiempo influye. Si pasamos muchas horas de pie deberemos intentar movernos aunque sea casi en el sitio. Cambiando el peso de un pie a otro de vez en cuando intentando evitar así una sobrecarga de la zona lumbar y la zona cervical.

  • En la cama

Pasamos muchas horas durmiendo, aunque en ocasiones sean menos de las que deberíamos. Por lo que la postura al dormir es muy importante, como también lo son la almohada y el colchón. Controlar la postura corporal al dormir es muy complicado, pero sí se debería procurar dormir de lado en lugar de boca abajo,con la cabeza bien apoyada en la almohada, las extremidades flexionadas, las manos a la altura de la cara o sobre la almohada y la espalda poco arqueada.
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[dt_sc_h2_title title=»Ejercicios para el dolor de cuello» description=»Estiramientos»]
Para prevenir el dolor de cuello, o cervicalgia, es ideal realizar estiramientos a lo largo del día y antes de ir a dormir. Estos deberán ser lentos, moviendo el cuello arriba y abajo, a izquierda y derecha, girando el cuello en círculos y dibujando círculos con los hombros.

Realizando estos ejercicios e intentando corregir malos hábitos posturales será mucho más sencillo prevenir el dolor de cuello o cervicalgia. Identificar las posturas que nos perjudican es el primer paso pasara evitar futuras lesiones.